Los VALORES son lo que lleva al ser a defenderse y reconocerse como entidad digna, teniendo en el conocimiento de que un valor moral necesariamente debe conducir a un bien moral.
Los valores morales perfeccionan al ser mientras que los ANTIVALORES lo degradan. Los valores perfeccionan al hombre en su ser, en su razón, en su voluntad, en su libertad.
El ser puede carecer de cultura, puede carecer de cosas, puede carecer de salud, etc., pero todo eso no lo menosprecian como persona, sin embargo la orientación negativa de su energía, viviendo en la mentira, en el fraude, en la violencia, hacen al individuo deshonesto y lo degradan como ser.
Trabajar para corregir antivalores es trabajar por la justicia que determine la perfección del ser.
Trabajar sobre ética y valores ayuda a tener una visión más amplia de la vida, del comportamiento de los demás y de lo que pasa en nuestro entorno a diario; así como de las formas en que nos relacionamos con los demás.
Primeramente habría que conocer el verdadero concepto de valor o “valores”, “principios”; sus clases y las características de estos llamados valores que tienen mucho que ver con la moralidad.
Expresión de estos valores son las normas morales, normativas conductuales que orientan la actuación y la conciencia; y por lo tanto, también las relaciones humanas.
Trabajar y estudiar valores es trabajar la inteligencia emocional, al menos una parte de esta. Para ello bien puede recurrirse a la filosofía de las personas que han trabajado sobre el tema y que pueden servir para formarnos nuestro propio criterio, la lógica y el sentido común tienen mucho que decir también.
Se trata en resumidas cuentas de profundizar en los conocimientos éticos y morales, con ello se adquirirá una visión más amplia para poder ver o dar solución a algunos temas y/o problemas que están presentes en la vida hoy.
©María del Carmen Calderón Berrocal
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